Plebeyos, nica príncipes

Sea gracias a Disney, a los Hermanos Grimm o a los cuentos de la abuela, desde pequeñas se nos mete en el cráneo la idea del príncipe azul. Ese guapo, valiente y temerario héroe que en su brioso corcel blanco llegaría a rescatarnos de las garras del dragón o nos despertaría de nuestro embrujo con un tierno beso al atardecer.(amenizado claro, por el cantar de los pajaritos y con conejitos corriendo por doquier)

Patrañas. Sobre todo cuando la verdadera historia ( léase estilo Primer Plano) es bastante menos romántica y harto más patética. En mi labor de servicio social, dejo a ustedes, señoritas lectoras, la cruda realidad para que a la hora de elegir, los descarten de inmediato; Y a ustedes, intrépidos lectores varones, las razones por las cuales presentarse como el príncipe azul es equivalente a ir por lana y salir trasquilado. Todo se remonta a la época medieval.

Estamos en el reino Franco, el que fue dirigido a duras penas por la dinastía Merovingia entre los siglos V y VIII. Meroveo fue el primero - por lo que el nombre de la dinastía deriva del suyo- y su nieto Clodoveo, quien se convirtió al cristianismo ( siendo el primer "rey bárbaro" en hacerlo tras la caída de Roma) fue quien expandió los territorios del reino instalando la capital, Paris, en el 507. La dinastía Merovingia tuvo nutrida descendencia y para perpetuar la pureza del linaje, comenzaron a emparejarse entre ellos. Craso error. Al mezclar sus mismos genes, potenciaron una pequeña pifia de familia:
La Cianosis.

Y, ¿ qué es la cianosis?

No entraremos en detalles sobre las patologías asociadas o causantes de ella. Baste decir en esta oportunidad que la cianosis dice relación con la falla en los glóbulos rojos, esos mismitos que le dan el color rojo a la sangre. Suponga que amarra una pitilla en su dedo muy fuerte (no lo haga) ¿qué pasa? exacto, corta la circulación y le dedo comienza a cambiar de color a tonos morados/azules, lo mismo que cuando alguien se ahoga               (tampoco lo haga). ¿Me sigue la idea? Los Merovingios, al mezclar tanto sus genes, potenciaron la cianosis, lo cual implicó dos cosas:

1. Su aspecto (piel, uñas) era más bien azul, de ahí el nombre de príncipes azules
2. Al tener la sangre pifiada, le llegaba menos oxígeno al cerebro, ergo, eran tarados, ergo...bien ganado tenían en apodo de "Los reyes holgazanes". Los Merovingios contaban con unos Mayordomos de Palacio (Suerte de Ministro del Interior y de Guerra) bastante eficientes que fueron heredando su cargo. Al llegar el siglo VIII, los árabes llegaron a Europa con el propósito de conquistarla ( recuerden que ocuparon España en 711) En su intento por avanzar hacia el norte, debían enfrentar a estos pelmazos azules- no los pitufos- pero fueron detenidos por Carlos Martel,mayordomo de palacio, ya que el rey ni se movió de su escritorio.

Childerico III último rey merovingio fue desplazado en 751 por Pipino El Breve , hijo de Carlos Martel, argumentando que en realidad él ejercia el poder y hacia las labores de rey, por lo que merecía el trono. Childerico III fue relegado al Monasterio de San Bertín y el muy menso ni siquiera elegó o pataleó por el trono. A modo de post data, Pipino el Breve, instauró una nueva monarquía en Francia y su hijo, Carlomagno, consolidó el Imperio Carolingio.

Por lo tanto, señoritas, olvídense de Disney. El príncipe azul es básicamente un flojo tarado, características que por cierto, los señores deben tener en cuenta al momento de cortejar a una dama diciéndole" soy el príncipe azul que siempre soñaste". Por mi parte, hace mucho tiempo que no los busco y de hecho, me alejo de ellos. Prefiero de todas maneras a plebeyos bien rosaditos y con glóbulos rojos de excelente calidad.